Hoy en la universidad he encontrado un gorrioncillo que se había caído del nido y paseaba indefenso por el camping. Cómo soy un poco cría, y me encantan los animales, no he podido resistir la tentación y he acabado recogiéndolo, adoptándolo y poniéndole nombre.
Recogerlo ha sido relativamente fácil, después de perseguirlo durante veinte minutos (no sabéis las vertiginosas velocidades que puede alcanzar un polluelo) le pedí a Fénix que lo cogiera... Y, al igual que unos tenemos tan pocos reflejos y habilidades, otros nacieron con la capacidad cazadora de los más grandes y fieros felinos. Así que el joven se agazapó entre el césped y atacó a la presa: en cosa de trece segundos el pequeño estaba en mi poder, dispuesto a ser adoptado.
La selección de un nombre apropiado que le garantizase cierto carisma y poder de atracción tampoco ha sido muy difícil. Le he bautizado con Flufy: el nombre más estúpido habido y por haber. Es lo que tiene pedirle a una de tus mejores amigas que haga el honor de escoger un nombre. Sí, que queda muy mono y todo eso... Pero con ese nombre nunca podrá llegar a ser presidente del gobierno, los programas de humor se cebarían con él.
Aunque bueno, igualmente es un pájaro. Aunque tenga muchas más capacidades que los candidatos actuales no creo que llegue a gobernar españa. La gente es muy cerrada en esos aspectos.
1 comentario:
Flufly???? :P Bueno, siempre es mejor que el nombre de mi pájaro, que no tiene, o al menos no que yo sepa ... A lo mejor por eso me odia e intenta picarme siempre, pq nunca le puse nombre, jejejeje.
Y eso ... que cuides muy bien de tu flufy xDDDDD. Bexitos guapa!!!
PD: Hoy tengo un dia aburrido y estoy por poner comentarios tontos, sorry ... si no me crees mira el blog de mar,la foto del 29/05 xD
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