Volvieron los exámenes y, como de costumbre, vuelvo blogocosa. Un lugar en el que olvidarme de todo, leer las historias de otras personas y escribir mis pequeñas tonterías e infructíferas aportaciones al mundo. Mi pequeña y querida vía de escape.
Empecé este verano con la determinación de estudiar un poquito cada día. Un esfuerzo diario para poderme enfrentar a los exámenes de septiembre sin miedos, hacer escabechina con las asignaturas y alzarme como la diosa de las recuperaciones.
Pero no, no tuve en cuenta el agotamiento físico que me provocaría levantarme a las seis de la mañana cada día para pasarme siete horas levantando paquetes cuyos pesos oscilan entre un quilo y los treinta. Una actividad diaria que aunque me ha mantenido en línea a pesar de comer como un riquishi (también tengo unos bíceps que ya querría Stallone), me ha provocado el mal hábito de entrar en coma nada más terminar de comer. Eternas siestas de entre dos y cuatro horas que finalizaban con un mal despertar y la incapacidad de hacer algo con mi intelecto. Dejé a un lado el blog, los estudios y empecé a usar el cerebrito tan sólo en la jornada laboral, no fuera que lo desgastase.
Se ha acabado el verano y me encuentro con que no he estudiado prácticamente nada; impotente ante un cóctel de exámenes y trabajo que me provoca taquicardias, bajones de tensión y un repentino desorden alimenticio que me impulsa a devorar chocolate constantemente. Mi estado anímico tan sólo me impulsa a quedar con otros seres humanos y unirme a los llantos típicos de los periodos de exámenes. Algo totalmente desaconsejable cuando se tiene el tiempo pegado al trasero.
Por eso, como respuesta consumista a mi depresión y medida drástica para quitarme las ganas de salir de casa, el otro día me fui de compras.
Recordando los discursos feministas de la profesora de Estudios Psicosociales sobre la Mujer sobre la moda como medida de represión y control de la fémina (ya que dificulta su movilidad y todo ese rollo -recordad la reducción de pies que se les hacía antiguamente a las niñas en China-), me compré unos zapatos dignos del sadomasoquismo más extremo. Preciosos, eso sí.
Mi idea es que cada vez que quiera salir de casa por motivos lúdicos tendré que ponerme esas máquinas de destrozar pies con nueve centímetros de tacón.
A ver si así se me quitan las ganas de ver el sol.
Nos encontramos ahora frente a dos posibilidades: o me encierro en casa y empiezo a estudiar como una posesa, o aprendo a llevar tacón cual modelo de Cibeles.
19 comentarios:
Y porque no te superas y superas cualquier limite humano y estudias dando paseos con esos zapatos? Míralo por el lado positivo: si alguien anónimo te graba, lo pone en youtube y se lo hace saber a un profesor de los que te examinan tienes medio aprobado por el esfuerzo.
Dios... yo QUIERO unos zapatos así. Cada vez que veo unos se me cae la baba...
Suerte. Al final conseguirás estudiar, aunque sea a última hora y sin dormir un par de noches. Pero lo harás, tu conciencia podrá contigo xD (no sé si esto son ánimos o te estoy hundiendo más XDDDD)
PD: ¿Me considerarías rara si te dijera que me han retrasado el inicio del curso una semana y eso me ha puesto triste? (es que todo el mundo me mira tan raro...)
Animo que seguro que sales adelante!!! Por cierto, muy bonitos los zapatos.
Ánimo :)
Dan miedo esos zapatos xD
Besos!
jajajajajajaj
Pues es una idea im-prezionante :) pero me parece que serás capaz de salir descalza a ver el solete, un abrazo!
Ánimo campeona que tú puedes :D.
Yo venía a meterme con los zapatos, pero después del comment de Anne, casi que me callo xD
Ánimo con los exámenes!! >___<
Si te sirve de consuelo yo ya los he terminado. Hace unos días. Jojojojo!
;D
Bonitos zapatos, ¿no salían unos iguales en Cabaret?
Suerte con los examenes, salud.
Muy bonitos los zapatos...¿por qué las cosas bonitas en realidad ... en realidad tienen un lado terriblemente oscuro?
Como esos zapatos, los miras... te hechizan con su belleza, caes en sus redes, te los pones.. y... te destrozan los pies!
Eso sí, todo es acostumbrarse.
Yo he ido unas 3 veces en tacones al trabajo, 10 min de camino se me hacían eternos al intentar no parecer un pato mareado al andar.
Pero con insistencia y valentía se puede conseguir!
Pero hay algo que compruebo después de llevarlos, vas por la calle y te das cuenta que las mujeres que se te cruzan, andan perfectamente con ellos, con toda la normalidad del mundo. Y es cuando una se pregunta... ¿qué hago mal? xDDDD
Bueno aparte de todo esto, suerte con los estudios!!! Aún te queda un poco de tiempo, no te dejes vencer por esas siestas!(que más que tentadoras, son inevitables,lo sé).
Bueno aprovecho para comentarte también que estreno un nuevo blog, algo más organizado.
Así que pasate si quieres :)
Cuídate y mucha suerte!
Pubreta.
No sabía que no supieras montar en bici. Yo me voy a pedir una para navidades!! n____n
Sí, lo sé, yo sé que me deseas.
Esos zapatos tenían que venir a juego con un bombín de lentejuelas, un bastón, un corpiño y un liguero.
Esos zapatos son para que retaconeen y reluzcan al son de You have to understand the way I am,
Mein Heeeeeeeeeerrrrr...
Ya lo sé. Soy un peliculero. Es lo que tenemos los esquizofrénicos. Que nos dan un dedito y nos colgamos del brazo ualaaaaa a lo bestia.
Kaworu: Porque la muerte sería inminente. Es imposible combinar ambas acciones sin que una espinilla decida partirse por arte de magia y tus dientes acaben incrustados en el asfalto. Además, dudo que el factor ridiculez se tenga en cuenta como criterio de evaluación. :_D
Anne: Yo también quería unos, lo de el estudio era sólo una mala excusa para que acabaran en mis manos. :_D
Espero lograrlo, por ahora tengo un exámen mañana y estoy plurkeando y leyendo blogs. No sé si soy adicta, estoy enferma o soy completamente gilipollas.
Es normal que te haya entristecido que retrasaran el curso una semana... Estudiabas Bellas Artes, ¿no? ¿Quieres que te deje de hablar? ¬_¬u
xDDD
La cuestión es que necesitamos salir de la rutina de vez en cuando... aunque la escapada conste en volver otra vez a las clases.
Dhiller: ¿Caminando o estudiando? Porque yo no lo veo aún muy claro.
Daria: No tienen por qué darte miedo niña, por ahora ni hablan ni matan a niños... por lo tanto muy peligrosos no deben ser. xD
Mandunguilla: Más que salir a ver el solete descalza me encierro en mi cuarto con el ordenador con los zapatos de tacón. xD
Anónimo: Gracias. :_D
Zorrocloco: Te daría de collejas si no estuvieras en la otra punta de España. xD
¡Qué felicidad debe dar tener vacaciones! >_<
Ahora bien, como te metas con mis zapatos Anne acaba contigo.
Céfiro: Si salían era porque Minelli tenía un gran gusto. xD
Muchas gracias por las suertes. :**
Mó: La esencia de la mujer es ver que todas caminan mejor con tacones que tú. Seguro que las "perfectas caminadoras" se sienten igual y te ven y te envidian como unas locas maniacas.
Gracias por las suertes y... ¡Al fin podré leerte con más asiduidad!
Ahora bien... ¿Substituyo el blog anterior por el nuevo o añado el nuevo?
Zell: ¿Tú por aquí melocotón?
Sí, dulce, te deseo... muerto. :P
Sabes demasiado sobre mí y tienes la boca muuuuuuuuy grande. >_<
Lástima que te tenga cariño por toda esa infancia de maltratos injustificados.
Nepomuk: Pues entonces me faltan el bombín, el bastón y la canción. xD
Ser peliculero no es malo, te hace pro. :P
Deberías obligar a tus zapatos a estudiar por ti, o al menos a esconderte chuletas como Dende manda
A lo mejor los zapatos de dan suerte, puedes hacerte chuletas para los exámenes en sus tacones.
Suerte con todo... incluso para aprender a caminar sobre 9cm xD
Saludos y gracias por tus comentarios ^^
La belleza hay que sufrirla, o eso dicen.
Yo apuesto por la segunda opción. Somos almas débiles,jeje.
Ante estudiar y una buena siesta yo me quedo con lo segundo.
Suerte con los examenes
Se dice que si caes desde unos tacones de 9 centímetros mueres de vieja antes de tocar el suelo... aunque bueno, nadie lo ha confirmado nunca, porque al ser una caída tan larga con una aceleración infinita de vaporizas antes de que esto suceda :P
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